El branding construye tu marca
Un buen branding es la suma de una buena estrategia + una buena comunicación gráfica.
Tú mejor que nadie sabes que para diferenciarte de tu competencia tienes que analizar tu mercado, distinguir tus valores, no perderlos de vista y ser coherente con ellos.
Si quieres que tu marca tenga un buen branding éste, debe tener presencia en todos los puntos de contacto que la marca tenga con tu consumidor: packaging, producto, comunicación, eventos, website.
Tiene que conectar con tu público objetivo a través de la tipografía, el logo, los colores, el mensaje, el punto de contacto. Desde el nombre, a la plataforma digital, desde un vídeo a la presentación de un evento.
A mí me pusieron un nombre cuando nací y no lo he cambiado en mi vida, por eso es tan importante la tarea de crear el nombre para tu marca, vas a ser reconocido por él mientras vivas.
Y tu cara visible debe reflejar lo que realmente eres.
Tu marca está en todos los lados y el branding trata de crear una experiencia atractiva y única.
Una buena experiencia de marca, favorecerá conversiones futuras.
Lo primero que necesita alguien para tomar una decisión de comprar o pedirte un presupuesto es la confianza.
¿Te imaginas que tu potencial cliente te vea de una forma en tu web, de otra en tus anuncios de facebook, de otra en tus folletos, y así en cada uno de los soportes que utilices para comunicarte?
Falta consistencia.
Es, como si comenzara a descubrirte de nuevo, con cada una de las herramientas que utilice para conectar contigo. Esto te hará perder fuerza, impacto, recuerdo, confianza.
Y una de las cosas que hace el branding es precisamente crear un clima de confianza y familiaridad entre una persona y un producto/servicio.
Si eres capaz de crear confianza la percepción de riesgo se diluye y el proceso de decisión se comprime.